Introducción

Seguramente has oído hablar del CBD, de sus propiedades cosméticas y de su compleja regulación, pero antes de hablar sobre cómo introducir el CBD en productos cosméticos, vamos a ver qué es esta nueva molécula de moda.

¿Qué es el CBD?

CBD son las siglas de cannabidiol, una sustancia presente en la planta de marihuana. A diferencia del THC o tetrahidrocannabinol que también se encuentra en dicha planta, el CBD no es psicoactiva, es decir, que no produce efectos psicotrópicos en el sistema nervioso.

La molécula del THC actúa uniéndose a los receptores cannabinoides (CB1 y CB2) del sistema nervioso central, concretamente en hipocampo, corteza frontal y cerebelo, entre otros. Lo que provoca una reducción de la coordinación y de la memoria [1].

Mientras que el CBD tiene menor afinidad por los receptores cannabinoides, en su lugar, se une a receptores como el TRPV1 implicado en la percepción del dolor o la inflamación. Por todo ello, tiene distintas propiedades que hacen del CBD un ingrediente interesante para la formulación cosmética y también en aplicaciones médicas para tratar diferentes afecciones.

Aplicaciones médicas del CBD

Dolor

Diversos estudios han mostrado el efecto analgésico que el CBD tiene sobre el dolor en modelos animales tanto en dolor inflamatorio, osteoartrítico o neuropático. Inyecciones de CBD en la sustancia gris del cerebro redujo la actividad de las neuronas nociceptivas (las que procesa la sensación dolorosa) de una forma dependiente de la dosis, este efecto se produjo por la interacción del CBD con los receptores adenosina A1 y TRPA1 [2].

En ensayos clínicos con humanos, el CBD ha demostrado ser seguro y efectivo al reducir la sensación dolorosa y el picor usando un gel transdérmico

Epilepsia

El CBD ha resultado ser eficaz en el tratamiento de la epilepsia. De hecho, actualmente podemos encontrar en el mercado un fármaco compuesto de CBD, aprobado por las agencias americana (FDA) y europea (EMA) del medicamento.

Este medicamento llamado Epidiolex, ha sido aprobado para el tratamiento de las convulsiones asociadas al síndrome Lennox Gastaut, síndrome de Dravet, y esclerosis tuberosa. De manera general, Epidiolex reduce la frecuencia de aparición de las convulsiones tanto en adultos como en niños a partir de 1 año [2].

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Migraña

La migraña se caracteriza por ser un dolor de cabeza de carácter pulsátil en un lado de la cabeza. Además, puede ir acompañado de sensibilidad sensorial, náuseas y vómitos. Aunque las causas de la migraña no se conocen exactamente, se cree que participan el tronco encefálico y sus conexiones con el nervio trigémino.

En un ensayo clínico realizado en 145 pacientes, se observó que más de un 60% de los pacientes que consumían CBD presentaban síntomas de la migraña más leves y una mejor calidad de sueño, además de una reducción en el consumo de medicamentos para la migraña [3].

Ansiedad

Algunos estudios clínicos muestran un efecto ansiolítico del CBD. Sin embargo, este efecto parece estar limitado al momento del consumo. Numerosos estudios preclínicos han mostrado este efecto ansiolítico agudo para desordenes asociados a la ansiedad como trastorno de ansiedad generalizada, trastorno de pánico, trastorno de ansiedad social, trastorno obsesivo-compulsivo y trastorno de estrés postraumático [4].

Sin embargo, son pocos los estudios realizados para evaluar el efecto del CBD como tratamiento crónico de la ansiedad, por lo que se necesitan más evidencias para soportar su uso. 

El CDB en cosmética

Acné

El acné se caracteriza por una producción elevada de sebo, inflamación y presencia elevada de Cutibacterium acnes en la piel. En un estudio realizado en sebocitos en cultivo y modelos de piel humana, se comprobó cómo el CBD inhibía la proliferación de los sebocitos al activar el canal iónico TRPV4 [5].

Por otro lado, un estudio en 20 pacientes con diferentes afecciones dermatológicas demostró que la aplicación tópica de pomada rica en CBD mejora significativamente la hidratación de la piel y reduce su nivel de inflamación.Finalmente, diversos estudios han demostrado que la planta de la que se obtiene el CBD, Cannabis sativa, tiene antimicrobiobianas que podrían ayudar en mejorar la calidad de la piel con acné [6].

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Arrugas

Como vimos en un post anterior, el aumento de estrés oxidativo está asociado a una activación del sistema inmune complementario que acaba por inflamar y dañar la dermis. El aumento de estrés oxidativo debido a la edad contribuye en los procesos de envejecimiento de la piel.

A pequeñas dosis, el CBD ha mostrado tener propiedades antioxidantes, lo que le convierte en un ingrediente interesante para las formulaciones cosméticas dirigidas a pieles maduras. En concreto, el CBD ha demostrado tener mayor capacidad antioxidante que el tocoferol o vitamina E [7]. .

Conclusión

A pesar de que aún hacen falta más estudios para tener la suficiente evidencia que confirme todas estas propiedades del CBD, existen indicios suficientes como para que su uso en las formulaciones cosméticas sea una realidad y aporte a diferentes condiciones de la piel, una mejora de su calidad.

Referencias
  1. Bloomfield, M. A., Ashok, A. H., Volkow, N. D., & Howes, O. D. (2016). The effects of Δ9-tetrahydrocannabinol on the dopamine system. Nature, 539(7629), 369–377. https://doi.org/10.1038/nature20153
  2. Mlost, J., Bryk, M., & Starowicz, K. (2020). Cannabidiol for Pain Treatment: Focus on Pharmacology and Mechanism of Action. International journal of molecular sciences, 21(22), 8870. https://doi.org/10.3390/ijms21228870
  3. Poudel, S., Quinonez, J., Choudhari, J., Au, Z. T., Paesani, S., Thiess, A. K., Ruxmohan, S., Hosameddin, M., Ferrer, G. F., & Michel, J. (2021). Medical Cannabis, Headaches, and Migraines: A Review of the Current Literature. Cureus, 13(8), e17407. https://doi.org/10.7759/cureus.17407
  4. Blessing, E. M., Steenkamp, M. M., Manzanares, J., & Marmar, C. R. (2015). Cannabidiol as a Potential Treatment for Anxiety Disorders. Neurotherapeutics : the journal of the American Society for Experimental NeuroTherapeutics, 12(4), 825–836. https://doi.org/10.1007/s13311-015-0387-1
  5. Oláh, A., Tóth, B. I., Borbíró, I., Sugawara, K., Szöllõsi, A. G., Czifra, G., Pál, B., Ambrus, L., Kloepper, J., Camera, E., Ludovici, M., Picardo, M., Voets, T., Zouboulis, C. C., Paus, R., & Bíró, T. (2014). Cannabidiol exerts sebostatic and antiinflammatory effects on human sebocytes. The Journal of clinical investigation, 124(9), 3713–3724. https://doi.org/10.1172/JCI64628
  6. Andre, C. M., Hausman, J. F., & Guerriero, G. (2016). Cannabis sativa: The Plant of the Thousand and One Molecules. Frontiers in plant science, 7, 19. https://doi.org/10.3389/fpls.2016.00019
  7. Hampson, A. J., Grimaldi, M., Axelrod, J., & Wink, D. (1998). Cannabidiol and (-)Delta9-tetrahydrocannabinol are neuroprotective antioxidants. Proceedings of the National Academy of Sciences of the United States of America, 95(14), 8268–8273. https://doi.org/10.1073/pnas.95.14.8268

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